LISTADO DE PICOS

miércoles, 30 de mayo de 2012

Pico de Ordiso (2.307 m.)


Subida por el Valle de Ordiso y descenso por el Valle de Otal

27 de mayo de 2012,

    Hoy nos acercamos al Valle de Bujaruelo, un buen destino para disfrutar del paisaje primaveral. Haremos una circular remontando el curso del río Ara en dirección al Valle de Ordiso, ascenderemos al Pico que da nombre a este último valle y regresaremos por el Valle de Otal.

   La excursión no tiene dificultades técnicas pero en la parte media del recorrido transitaremos fuera de senda con lo cual es preciso orientarse bien o conocer la zona. En nuestro caso utilizamos el GPS y no tuvimos ninguna dificultad.

  Aparcamos en el Mesón de Bujaruelo y comenzamos a caminar sobre las 08:20 horas. Cruzamos el puente de piedra para caminar por la margen orográfica izquierda del río Ara, que baja con bastante caudal. Seguimos las marcas del GR11 por la agradable senda junto al cauce de agua.

   Pronto confluimos con la pista que comienza a ascender en dirección al Refugio del Puente de Ordiso. Ganamos altura y disfrutamos del ambiente primaveral que invade las laderas. Las hayas se muestran de un verde intenso y los abetos se adornan con los nuevos y tiernos brotes anuales de un verde claro en las puntas de las ramas.

   Ha transcurrido una hora de agradable caminata cuando alcanzamos el Refugio pastoril del Puente de Ordiso. Abandonamos el GR11 que continua rumbo norte hacia la cabecera del Ara y nos desviamos a la izquierda por la senda que baja a cruzar el Puente de Ordiso. Pasamos a la otra orilla y comenzamos a remontar el valle. El barranco de Ordiso baja también caudaloso y forma algunas bonitas cascadas que alegran el camino.

   Con el río Ordiso siempre a nuestra izquierda llegaremos en unos 40 minutos hasta una cabaña derruida en la cabecera del valle. Solo queda en pie parte de un muro y el tejado de chapa roja que todavía podría servir de precario refugio improvisado.

   Varias cascadas de agua se desploman por el barranco de Ferreras y otros barrancos anejos. El paraje es realmente bonito, con varios cursos de agua precipitándose a izquierda y derecha. Cruzamos el barranco con alguna dificultad debido al caudal y comenzamos a remontar unas lomas en dirección sureste hacia el Pico Ordiso. Todo este tramo discurre por zona de pastos sin senda. Habrá que ascender unos 500 metros de desnivel antes de alcanzar la cumbre.

   Vemos muchas marmotas y alguna manada de sarrios que nos amenizan la ascensión. Por fin alcanzamos el cordal que divide los Valles de Ordiso y de Otal, al Este del Pico Ordiso. Seguiremos ahora por la divisoria hasta encaramarnos a la cima.

   Hay bastantes nubes en el horizonte que tapan parcialmente las cumbres, pero las vistas hacia el Vignemale, la zona de Taillón-Gabietos, Mallarruego, Tendeñera y la Peña de Otal son de primer orden. Por encima de los 2.500 metros todavía se ve bastante nieve.

   Algunas oscuras nubes amenazantes nos disuaden de entretenernos en la cima y comenzamos el descenso por las empinadas faldas al sur de los Picos de Asnerillo. Nos encaminamos en dirección al Collado de Ordiso con intención de enlazar con la senda que por la Faja Basarán confluye con el GR que viene del Collado de Tendeñera.

   Una vez alcanzamos las marcas del GR comenzamos el descenso directo hacia el Valle de Otal. Hay que ir atentos porque hay numerosas sendas que hacen las vacas y que pueden despistarnos. La bajada hacia el fondo del valle hace varias lazadas y debemos seguir las marcas blanquirrojas.

   Llegamos a la cabaña de Otal y hacemos una breve parada. En esta zona hay paseantes y familias con niños disfrutando en las praderas a orillas del río Otal. Ya solo nos resta continuar el placentero camino por este precioso valle hasta enlazar de nuevo con el GR11 junto al río Ara y retornar a Bujaruelo.


  • Desnivel + acumulado: 1.023 m
  • Horario total: 6,5 h. 
  • Distancia recorrida: 20,4 km.



Subiendo por la pista hacia el Refugio del Puente de Ordiso


El verde predomina en las laderas


Cruzando el Ara por el Puente de Ordiso


En la cabecera del Valle de Ordiso , varias cascadas caen por el barranco de Ferreras


Un merecido descanso


Elena con el Macizo del Vignemale detrás


Valle de Otal en las profundidades. Peña de Otal en las alturas


Nos despedimos del bonito y verde Valle de Otal


Elena se gira para echar un último vistazo


Tonalidades cerca de Puente Oncins


De nuevo junto al curso del Ara, cerca del Mesón de Bujaruelo


Track del recorrido en Google

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martes, 29 de mayo de 2012

BTT circular al Monte Oturia. Pueblos abandonados del Sobrepuerto

Recorrido por las poblaciones de Lárrede, Javierre del Obispo, Satué, Isún, San Román de Basa, Yebra de Basa, Cortillas, Cillas, Basarán y Oliván

26 de mayo de 2012,

   Este sábado cargo la bici en el coche y me acerco hasta la pequeña población de Lárrede, a unos 7 Km. de Sabiñánigo. En este municipio podemos visitar dos bonitas iglesias románicas mozárabes: San Pedro de Lárrede y San Juan de Busa.

   Mi idea es hacer una ruta circular al Monte Oturia en bici atravesando varias poblaciones. La primera parte del recorrido transita por las antiguas sendas y caminos de herradura que unen los pueblos de Lárrede, Javierre del Obispo, Satué, Isún, San Román y Yebra.  Todos estos núcleos se encuentran a las faldas oeste y sur del Oturia.

   Este primer tramo no supera gran desnivel pero se hace a un ritmo bastante lento debido a que tendremos que desmontar de la bici en numerosas ocasiones. La senda, que coincide en la mayor parte del trazado con senderos tipo PR o GR, está erosionada en algunos puntos,  en otros encontraremos piedras que dificultan la ciclabilidad y también algún repecho, alguno bastante fuerte,  que se supera mejor empujando la bici. Quién prefiera mayor comodidad puede ir hasta Yebra por carretera pero le quitará gran encanto a esta ruta pues cada pueblo tiene su atractivo especial.

   Me lo tomo con calma, así que ya ha transcurrido casi hora y media y tan solo he recorrido 12 km. cuando me planto en la ermita a las afueras de Yebra  donde arranca la ancha pista que sube hasta Santa Orosia. Comparado con las sendas que acabo de recorrer esto es una autopista. Ahora tendré que ascender más de 700 metros de desnivel. No obstante la subida es bastante tendida y el firme está muy bien compactado.  Pongo el plato pequeño y voy ganando altura casi sin darme cuenta. Durante la subida disfrutaremos de buenas vistas de la Bal de Basa y la Bal Ancha. Al este, no muy lejos, se ve Peña Canciás.

   Cuando ya he ascendido 650 metros llego a la explanada de Santa Orosia donde hago una parada en la fuente para rellenar agua y comer un poco. En esta fuente cuenta la tradición que Santa Orosia fue decapitada.

  Tras refrescarme continúo pedaleando todavía en sentido ascendente bordeando la cima del Oturia por el sureste hasta alcanzar el puerto que me asoma a la vertiente del Sobrepuerto, donde se encuentran varios pueblos abandonados. Ante nuestros ojos y hacia el norte emergen de golpe la Sierra de Tendeñera y  el Macizo de Monte Perdido, con las cumbres todavía cubiertas de nieve.

   Comienzo el descenso por una pista, algo rota, que va girando rumbo este  Tras algún repecho me desvío por una pista que baja directa a Cortillas. Me sorprende y me alegra ver alguna casa rehabilitada. Recorro tranquilamente las ruinas y los alrededores del pueblo intentando imaginar como era el pueblo cuando estaba habitado.

   Ahora me dirigiré al cercano pueblo de Cillas, en estado todavía más ruinoso. En lugar de regresar por la pista seguiré las marcas de un PR que me obliga a hacer algunos sube-bajas para salvar un barranco. La senda tiene bastante vegetación y pasa junto a algunas refrescantes fuentes. Tendré que desmontar continuamente debido a lo espeso de la maleza, pero en pocos minutos llego al pueblo cuyas ruinas están siendo devoradas por las plantas.

   Desde Cillas regresaré a la pista principal por el antiguo camino principal de acceso, todavía con parte de los muretes de piedra en pie pero bastante desdibujado por el prolongado abandono.

  Seguiré ahora rumbo norte hasta el desvío de Basarán, otra población abandonada. Tendré que descender un poco para visitar las ruinas del pueblo, ahora invadidas por multitud de vacas, que me miran curiosas cuando pedaleo a su lado o se apartan haciendo sonar estrepitosamente los cencerros.

   Desde Basarán veo al otro lado del barranco Forcos las ruinas de Escartín. Más al norte también se perfilan las construcciones semiderruidas de Otal, y sus bancales flanqueados por los montes Erata, Pelopin y Monchoya.

   Retrocedo de nuevo hasta el cruce y comienzo el largo descenso por la pista que me llevará hasta Oliván. La pista discurre junto al barranco de Bergusa, que se adivina profundo entre los árboles. Durante la bajada paso junto a los desvíos de Ainielle, Bergusa y Susín, que ya he visitado otras veces caminando.

    A la altura de Oliván continuo a mano izquierda por una pista que enlaza con la pequeña carretera que me llevará de nuevo a Lárrede. Antes pararé para visitar la iglesia de San Juan de Busa, enclavada en un prado a las afueras de Lárrede.

   Cuando llego al coche, como me quedan fuerzas y tengo tiempo decido prolongar brevemente la excursión y subo a visitar la Torre del Moro, emplazada en una atalaya justo encima del pueblo. En un par de repechos muy duros  tendré que desmontar de la bici. Desde la Torre tenemos una buena vista sobre la población de Lárrede y del Valle de Biescas. Tras disfrutar de la panorámica desciendo con cuidado hasta el coche donde doy por finalizada la excursión.


  • Desnivel + acumulado: 1.483m. 
  • Horario total: 5,5 h. 
  • Distancia recorrida: 51,4 km
  • IBP Index: 113 AA


Sendero en las proximidades de Satué


Santa Orosia y su fuente


Cortillas. Calle abandonada


Fuente-Abrevadero camino de Cillas


Cortillas visto desde Cillas con el Monte Oturia a lo lejos


San Juan de Busa. Punta Güé al fondo


San Pedro de Lárrede


Perfil del recorrido


Track en google

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jueves, 17 de mayo de 2012

Pico Coronas (3.293 m.) y Pico del Medio (3.346 m.)


Ascensión en ruta circular con esquís desde la Besurta. Subida por el Glaciar de la Maladeta-Portillón Superior y descenso por el Glaciar del Aneto-Aigualluts

13 de mayo de 2012, 

   Segundo día de nuestro fin de semana en las Maladetas. El sábado por la noche vienen desde Zaragoza Nacho y Angel para dormir en el apartamento de Daniel en Campo. Nos tienen preparada una sorpresa, Angel, gran aficionado a la cocina, se trae los bártulos de cocinar e incluso su traje de faena con gorro de cocinero incluido y nos prepara unos suculentos fideos a la paella muy completos con verduras y carne. Todos repetimos y alguno hasta “tripite”.

   A la mañana siguiente partimos rumbo a Benasque y subimos de nuevo a la Besurta con intención de ascender a los Picos Coronas y del Medio, muy cerca del Aneto.

   Entre unas cosas y otras, a pesar de madrugar, ya son las 9 cuando comenzamos a caminar. Como ayer, porteamos unos 15 minutos antes de ponernos los esquís camino de la Renclusa.

   Al cabo de media hora pasamos por la parte trasera del refugio y vamos ganando altura en diagonal para enlazar con la marcada huella que sube por el glaciar hacia el Portillón Superior.

   Un poco antes de las 11:30 llegamos al Portillón. Bea da un grito y un salto de alegría con esquís y todo cuando ve la estampa del Aneto enmarcada en el Portillón. Está entusiasmada y feliz., ¡Cómo vive la montaña! Todos nos reímos contentos de ver su reacción.

   Nos hacemos unas fotos y descendemos al glaciar del Aneto. La nieve no está dura y no necesitamos crampones. Avanzamos un trecho y paramos a comer algo junto a unas rocas. El cielo se va cubriendo. Al otro lado de la frontera y en el Valle de Arán hay nubes bajas que cubren los valles.

   Continuamos la larga travesía por el glaciar en dirección al Aneto. En algunos momentos chispea un poco y ya queda muy poca gente subiendo, la mayoría están descendiendo ya. Cuando ya nos aproximamos al Collado de Coronas dejamos la huella normal que sube hacia el Aneto y continuamos por otra huella, mucho menos marcada, que asciende hacia el Collado del Medio.

   Por delante va un grupo que resultan ser los montañeros de Teruel, con quienes ya coincidimos ayer, y que nos han marcado la huella. Cuando llegamos al Collado del Medio las nubes nos invaden y nos quedamos sin visibilidad. Nos reagrupamos los cinco y decidimos subir primero al Pico Coronas que es el más sencillo. Vamos andando aunque se podría haber subido con los esquís. Llegamos a la cima envueltos en las nubes. Una pena no poder ver la estampa del Aneto, tan próxima.

   Bajamos de nuevo al Collado sin perder tiempo y decidimos subir a la más complicada cima del Pico del Medio. Bea se pone los crampones y Angel decide esperar en el collado. Nacho, Daniel y yo subimos sin crampones pues la nieve no está dura.

   Ganamos altura y realizamos algunas trepadas por roca. La pendiente cada vez es mayor y cuando la niebla se abre se vislumbra un buen patio por ambas vertientes, así que mejor asegurar cada paso. Cuando faltan unos 50 metros para la cima dejamos los bastones y nos ayudamos del piolet para superar alguna pala empinada de nieve. Nos encaramamos a la arista realizando un paso a horcajadas para salvar una roca antes de alcanzar la estrecha cima. Un poco más adelante se ve la tenebrosa arista de rocas puntiagudas que se dirige a Punta Astorg y el Maldito. Parece bastante complicada y ofrece un aspecto fantasmagórico entre la bruma.

   Hacemos el ritual del salto en la cima, en esta ocasión más bien flexión de piernas porque no nos atrevemos a saltar, no nos vayamos a ir todos abajo. Retrocedemos sobre nuestros pasos con cuidado hasta regresar al collado donde nos espera Angel, que se está quedando frío.

   Nos preparamos para bajar esquiando y nos lanzamos por la empinada pala siempre con tendencia a la derecha (este) para enlazar con la ruta normal de bajada del Aneto.

   Hay niebla y vamos muy cerca unos de otros. Nos reagrupamos cada dos por tres para no perdernos. La nieve está realmente buena para esquiar. Se desliza bien, sin riesgo y con facilidad. Nacho cierra el grupo y le oímos continuamente dar gritos de felicidad. Todos disfrutamos bajando por una nieve tan fácil de esquiar.

   Mientras descendemos la niebla va remitiendo y pronto llegamos a Barrancs. Conforme nos acercamos al cauce de agua la nieve se va haciendo más escasa, las rocas afloran y tenemos que ir buscando los mejores pasos evitando algunos agujeros y trampas.

   Finalmente llegamos al Plan de Aigualluts donde nos quitamos los esquís. Vemos que el río baja muy crecido, el llano está inundado de agua. El barranco de la Escaleta baja a tope, el torrente ruge con fuerza. Cruzamos el río como podemos, en algunos casos metiendo las botas hasta el tobillo y haciendo equilibrios. Yo termino con las botas llenas de agua.

   Cual es nuestra sorpresa cuando al llegar al otro lado vemos aguas arriba una especie de puente de madera que nos hubiera permitido cruzar sin problemas.

   Con los esquís en la mochila iniciamos el largo porteo hasta la Besurta. Pasaremos por el Forau de Aigualluts. La cascada de agua baja estrepitosa. Estamos un rato contemplando el estruendo que causa este fenómeno natural y cómo semejante cantidad de agua desparece por la sima del Forau para alimentar las aguas del Garona en Francia, privando a Aragón de tan importante caudal.

   Bea está encantada conociendo estos bonitos parajes. Continuamos caminando. El paisaje en estas cotas bajas es primaveral. Cuando llegamos al coche vemos que la mayoría de la gente se ha marchado y en el aparcamiento ya quedan muy pocos vehículos. Daniel ha traído la nevera y unas patatas fritas, así que nos tomamos unas cervezas frías que nos saben a gloria. La verdad que no podría pedir mejor despedida de la temporada de esquí de travesía.


  • Desnivel + acumulado: 1.500 m. 
  • Horario total: 9,5 h. 
  • Distancia recorrida: 15,4 km.



Portearemos 15 minutos desde la Besurta antes de encontrar nieve contínua


Bea en el Glaciar de las Maladetas


Nacho espera resguardado junto al Portillón Superior

Así descubrió Bea el Aneto por primera vez


Los cinco en el Portillón Superior con el Aneto al fondo


Tráfico en el Portillón. Unos van y otros vienen


Un grupo regresa andando. Entran nubes por el norte


Bea y Nacho. Cima del Pico del Medio


Cima del Pico del Medio


Destrepando hacia el Collado del Medio


Angel y Nacho en Barrancs


Cruzando el río con dificultad. El agua baja con fuerza


Aflojando las botas para portear


Por Aigualluts de regreso a la Besurta


La cascada del Forau baja espectacular


Track del recorrido en Google




Otras excursiones por la misma zona:



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martes, 15 de mayo de 2012

Sayó (3.220 m.), Cordier (3.254 m.) y Muela de Alba (3.118 m.)


Ascensión en ruta circular con esquís desde la Besurta a la Muela de Alba, Sayó (Segundo Pico Occidental de la Maladeta) y Cordier (Primer Pico Occidental de la Maladeta)

12 de mayo de 2012,

   Este fin de semana daré por terminada mi temporada de esquí de travesía. Daniel Mur ha propuesto un par de interesantes rutas para coronar algunos tresmiles por la zona de Maladetas, así que el viernes por la tarde, en compañía de Bea “la andaluza”, nos desplazamos a su apartamento en Campo donde establecemos el “campamento base”.

  El sábado subimos en coche hasta la Besurta (1.900 m). Son las 8:15 cuando comenzamos a caminar en dirección al refugio de la Renclusa. En el glaciar, a lo lejos, se vislumbran multitud de montañeros diminutos como puntitos ascendiendo lentamente.

   Tendremos que portear unos 15 minutos hasta que nos podamos calzar los esquís, aproximadamente a la altura del desvío de Aigualluts. Con el calor de esta semana ha desaparecido bastante nieve, se nota que hay menos espesor y la cota esquiable sube día a día.

   Comenzamos a foquear y en media hora pasamos junto al refugio de la Renclusa (2.140 m.) donde se aprecia claramente como ha menguado la nieve respecto a la semana pasada.

   Seguimos la huella que en dirección suroeste se dirige hacia el Pico de Alba. Tras subir la primera pala abandonamos la huella momentáneamente y pasamos junto a los ibones de Paderna, que ya empiezan a deshelarse.  Desde allí nos dejamos caer a un rellano y volvemos a enlazar con la huella principal.

  Iniciamos ahora el largo ascenso alejándonos paulatinamente del Pico Paderna, que lo iremos dejando siempre a nuestra derecha y después a nuestra espalda.

  Sobre la cota 2.800 m. abandonamos la ruta normal del Pico de Alba y seguimos unas huellas que ascienden hacia el sur en dirección al Collado de Alba (3.081 m.). El cielo se cubre de nubes negras, baja la temperatura rápidamente y comienza a llover. Vemos algunos esquiadores que se retiran y por un momento nos tememos que tendremos que darnos la vuelta. Nos abrigamos y aprovechamos para comer un poco y entretanto cesa de llover, así que seguimos con nuestra ruta, aunque las nubes amenazantes no se retiran.

    Al collado puede accederse directamente subiendo por un canalón al oeste del Pico Mir. Veo que un poco más a la derecha hay huellas de esquís que ascienden en dirección a la Muela de Alba, así que mientras Daniel y Bea terminan de subir al collado me adelanto y subo con los esquís puestos hasta el mismo collado. Me quito las tablas y subo en pocos minutos a la Muela de Alba, con alguna trepada bastante sencilla.

   Vuelvo a bajar y me reúno con mis compañeros en el collado. Desde allí vemos a un grupo de esquiadores de Teruel que ascienden directamente hacia el collado entre los Picos Mir y Sayó. Nosotros en cambio flanquearemos una larga media ladera más hacia el sur, en dirección al Pico Bondidier. La pendiente es fuerte y la nieve está blanda, no hacen falta cuchillas pero hay que marcar con precaución y firmeza la huella para no resbalar hacia abajo.

  Llegamos al collado Cordier (3.121 m.). Tenemos el Pico Bondidier allí mismo aunque Daniel me comenta que la cima está oculta detrás y hay que seguir una cresta para alcanzarla, así que la dejamos para otra ocasión. Giramos 180º para acometer la subida con los esquís puestos hasta la misma cima del Pico Sayó, también llamado Segundo Pico Occidental de la Maladeta (3.220 m.). Allí nos juntamos con el grupo de Teruel que han subido por la arista noroeste con los esquís a la espalda realizando una trepada.

   El tiempo está algo revuelto. No perdemos tiempo y nos dejamos deslizar con los esquís, sin quitar las focas, hasta el collado entre los picos Sayó y Cordier. Desde allí iniciamos la ascensión hasta el Pico Cordier. Hay que abrir huella porque nadie ha subido por esta ruta hoy. Alcanzamos la cima del Cordier o Primer Pico Occidental de la Maladeta (3.263 m.). En la cima nos juntamos de nuevo con el grupo de Teruel y otros montañeros que están subiendo directamente desde el glaciar de las Maladetas.

  Comemos algo y nos preparamos para bajar esquiando. Desde la misma cima nos lanzamos por una empinada pala al oeste de la cima. También se puede bajar por otra pala al este de la cima. Bea prefiere bajar andando el primer trecho. Con la nieve blanda se hunde continuamente haciendo que su bajada sea algo penosa y cansada, quedándose atrapada con las piernas clavadas en la nieve cada dos por tres.

   La pala desemboca en una meseta justo encima de la Torre Cordier. Desde este rellano hay que bajar al glaciar hacia el este. Cuando hay abundante nieve se baja directamente esquiando pero ahora no hay suficiente espesor y se ha formado un escalón de roca que hay que destrepar. Así que nos cargamos los esquís a la espalda y descendemos con cuidado.

   Una vez en el glaciar nos ponemos los esquís y nos lanzamos directos hacia la Renclusa. La nieve está blanda y pesada al principio pero conforme bajamos y alcanzamos la nieve de color rojizo la calidad mejora y disfrutamos encadenado giros. Pronto llegamos a la Renclusa, rodeamos el refugio por detrás y continuamos esquiando, aprovechando cualquier lengua o resquicio esquiable hasta que la nieve desparece, cerca del río. Nos cargamos de nuevo los esquís a la mochila y en 10 minutos llegamos de nuevo al coche.


  • Desnivel + acumulado: 1.408 m
  • Horario total: 8 h. 
  • Distancia recorrida: 13 km.


Salimos de la Besurta porteando


Primeras rampas rumbo al Collado de Alba


Por delante llevamos a un grupo de montañeros de Teruel


Tras descender de la Muela de Alba me reúno con Bea y Daniel en el Collado de Alba


Dejamos atrás la Muela y el Diente y nos vamos hacia el collado Cordier


Bordeamos por el oeste el Pico Sayó, en un flanqueo algo empinado


Subiendo al Sayó dejamos muy cerca el Pico Bondidier. Más lejos los Picos de Cregüeña


Los turolenses han subido al Sayó por la arista noroeste


Llegando al Cordier. Espectáculo de cumbres


Al suroeste la Maladeta Oriental, Abadías y Maldito


Hora de bajar


Destrepando al glaciar con cuidado. Se ha formado un escalón en la meseta


Track del recorrido en google



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